Mediante este pronunciamiento, la Corte Suprema ha analizado el alcance de la posición de garantía del gerente de una empresa dedicada al transporte. En el caso específico, el colegiado califica a la empresa de transporte como una fuente de riesgos para los pasajeros. Por ello, atribuye al gerente comercial el deber de actuar tanto para prevenir la generación de riesgos típicos como para mantener los riesgos ya existentes dentro de los límites legalmente permitidos.